Las manecillas del reloj avisaron que la hora había llegado, cinco pm y los diestros cruzaron la puerta de cuadrillas para...
Las manecillas del reloj avisaron que la hora había llegado, cinco pm y los diestros cruzaron la puerta de cuadrillas para pisar la arena del coso moreliano.
Ovaciones, gritos y palmas alertaban la presencia de tres grandes de la tauromaquia, Pablo Hermoso de Mendoza, Diego Silveti y Roca Rey, dieron forma a un balanceado cartel que fue aderezado con la presentación de los Recortadores Españoles.
Guillo, de 400 kilos salió al redondel donde lo esperaban Diego, Raúl y Juan José con una suerte de piruetas que sorprendió a los presentes, a recorte y voltereta mantuvieron el ánimo de la gente quien brindó las palmas para los sevillanos.
Llegó el turno del considerado maestro del rejoneo Pablo Hermoso de Mendoza, quien haciendo uso de sus jacas lidió a cumpleañero un cárdeno cornicorto y rasurado de 500 kg. Toro de poca embestida y que rehuía, hizo de la faena un trámite sufrido para el de a caballo que pese al mal burel y la rechifla del público, logró sembrar dos pares de banderillas largas y uno de cortas y 4 pinchazos en la suerte suprema para rematar con un estoque muy trasero.
Era turno de la dinastía Silveti, Diego tomó turno al capote para bregar a Güero de la ganadería Pablo Moreno, un cárdeno enmorrillado y cornilón que le ayudó a Silveti a pegar una buena tanda con pases de pecho y naturales con la muleta. Dos tropiezos del toro obligaron al diestro a utilizar recursos muy toreros para ganar el reconocimiento del respetable, demostrando escuela y tradición.
Tocando pelo con el primer estoque aunque el toro no dobló, dio a Diego el primer aviso luego de dos pinchazos con el de descabello para terminar la faena.
Guapito de 448 kilos de la Ganadería Montero, toro negro estornino cornifino fue el primero para el joven maravilla Roca Rey, haciendo alarde de gran toreo en el capote, pegó 2 tandas muy lucidas, lastimado de la pica se volvió un toro vago en la suerte de muleta que solo le alcanzó a Roca Rey para pegar unas pocas tandas rescatables.
Entre abucheo y rechifla Pablo Hermoso salió al ruedo a tratar de reivindicarse con los presentes, lidiando a Regao un cárdeno nuevamente rasurado de la ganadería Campo Hermoso con 448 kilos. El español mejoró la faena con el astado pegado a los cuartos de las yeguas para pones el primer par de banderillas bien colocado, mostrando que es sin duda figura del rejoneo.