Chacaleo Exprés: Los Retos de Alfonso Martínez en su Segunda Parte
Autor: Miguel García Tinoco
Autor multimedia: Especial
Alfonso Martínez Alcázar será, por segunda ocasión, presidente municipal de Morelia. En su segunda parte al frente de la Comuna moreliana, Poncho Martínez llega con muchas desventajas, porque, en primer lugar, la gran mayoría de los votantes no sufragó por él sino en su contra.
En total, 182 mil 459, electores no votaron por el candidato del PAN-PRD, mientras que sí fue el favorito de 102 mil 453 personas que acudieron a las urnas el pasado 6 de julio.
Es decir: Alfonso fue llevado por una minoría a su segundo mandato en la Capital michoacana; eso es, sin duda, una desventaja para el próximo alcalde de Morelia.
Una buena, es que Martínez ya no contará con Jesús Ávalos, quien demostró ser un muy mal secretario; pero tampoco será acompañado por Antonio Plaza Urbina, quien si bien es un tipo malquerido por sangrón, tiene oficio político y le ayudó a Poncho en la “Administración Independiente”.
Sólo Alfonso, Jesús y Antonio saben por qué terminaron tan mal, después de haber sido un equipo sólido.
Alfonso Martínez, tiene ante sí grandes retos; particularmente las cuotas que está obligado a pagar al PAN y PRD, a la familia Calderón y a su propia gente.
Ganar con la voluntad de muchos actores políticos no siempre es benéfico. Al final son muchos los que se abrogan la victoria y reclaman espacios como si hubieran aportado mucho.
Martínez Alcázar ya tiene experiencia de que cuatro regidores “independientes” le dieron la espalda en sus primeros tres años; en aquel tiempo tampoco el gobernador fue su aliado.
Si de nueva cuenta decide jugársela sin alianzas externas, la segunda parte de Alfonso Martínez Alcázar, al frente de Morelia, será un rotundo fracaso en detrimento de sus aspiraciones políticas.
Poncho hereda una ciudad con sus calles hechas pedazos; y lo peor: con índices de inseguridad elevadísimos. Hace 6 años, Martínez Alcázar optó por un arribista vende humo, recomendado por Manuel Oliva, ex gobernador guanajuatense… y fracasó porque no hubo una verdadera protección ciudadana. Idealizaron una Policía clasista que agredió al pueblo un día sí y otro también.
En los tres años de Morón-Arróniz, la Policía Municipal se descompuso todavía más, por una evidente incapacidad en sus mandos; Alfonso no debe retomar el modelo de Bernardo León y mucho menos mantener lo que hoy tenemos; una verdadera participación ciudadana es lo que se necesita para enfrentar la creciente inseguridad.
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